Dos palabras han definido mi trayectoria profesional: adaptación y cambio.

Por distintas circunstancias y contextos, he desarrollado una carrera transversal a lo largo de diversas agencias, un grupo de medios y desde el lado del cliente, desempeñando roles variados para cualquier área del marketing y la comunicación.

Esta transversalidad me ha llevado a encontrarme con el insight de la realidad actual:
todo está conectado.

Hay un nuevo paradigma donde ya no hay barreras entre lo físico y lo digital. Las marcas necesitan ser flexibles y relevantes porque entretener e inspirar es tan importante como emocionar y vender. La creatividad ya no es sólo un fin, también es un medio para ser parte del diálogo cultural.

Y este paradigma tiene un nuevo valor:
ser transversal.